Es uno de los sectores que más cambios ha vivido a raíz de las recientes crisis económicas (financiera y post pandemia), de los últimos años; así como del radical proceso de digitalización en el que nos encontramos. Durante todo este tiempo ha sido y es un sector marcado por un proceso de consolidación local y transaccional sin precedentes, por un recrudecimiento del marco regulatorio para las entidades y por el continuo y mantenido estrechamiento de tipos y márgenes. Además, se han acentuado tendencias previas a la crisis como la globalización, la mayor importancia de las economías emergentes, el auge de la digitalización y de nuevo competidores como las Fintech, el comercio internacional y las transacciones electrónicas.
Si hubiese que definir un rasgo común hacia el que ha tenido que evolucionar cualquier profesional del sector, independientemente de su línea de negocio, sería el de ser capaz de generar relaciones más personales y de mayor confianza con el cliente, guiándose por una ética profesional clara y sin ambigüedades.
Aportamos una amplia experiencia trabajando para entidades nacionales y multinacionales, donde el éxito de los profesionales se basa en su capacidad para desenvolverse en un entorno altamente competitivo, en aportar un conocimiento claramente especializado y en demostrar cada vez más proactividad y capacidad de innovación. Partimos de una comprensión profunda de las distintas actividades, culturas, metodologías y drivers de relación con el cliente en los siguientes ámbitos: